Medina Azahara, 20 diciembre 2025

Medina Azahara es una institución del rock español y referente del rock andaluz desde su fundación en Córdoba en 1979. La banda nació en plena Transición — con Manuel Martínez en la voz, Miguel Galán en la guitarra, Manuel S. Molina al bajo, José A. Molina en la batería y Pablo Rabadán en los teclados — y pronto se ganó el reconocimiento del público gracias a su fusión de hard rock, influencias progresivas y evocaciones flamencas. Bajo el amparo del sello CBS editaron en 1979 el disco “Medina Azahara”, también conocido popularmente como “Paseando por la mezquita”, cuyo tema homónimo se convertiría en himno del grupo.

Primeros pasos y consolidación (1979–1982)

Tras despegar con el debut homónimo, en 1981 publicaron “La esquina del viento”, consolidando el carácter melódico y conceptual de su propuesta. Al año siguiente, en 1982, llegó “Andalucía”, una obra que profundizaba en el sonido andaluz y el rock sinfónico, aunque ya empezaban a percibirse signos de debilitamiento comercial en el panorama del rock hispano.

Recuperación y experimentación a finales de los ochenta

Tras un periodo de inactividad discográfica y cambio de sello, en 1987 lanzaron “Caravana española”, trabajo que marcó un regreso sobrio tras años sin grabar. El álbum reflejó los vaivenes del rock andaluz en aquella época, aunque mantuvo el sello personal del grupo. A finales de esa década, el grupo se inclinó hacia sonoridades más densas y sinfónicas, lo que cristalizó en “En Al‑Hakim” (también referido como “… En Al‑Hakim”), lanzado en 1989 y destacado por su fusión de flamenco y atmósferas rockeras.

El gran salto: “Sin tiempo” (1992)

Su sexto álbum, “Sin tiempo” (1992), supuso un hito creativo y comercial: canciones como “Necesito respirar” y “Todo tiene su fin” superaron las 100.000 copias vendidas en solo tres meses, consolidando una etapa dorada para la banda. Además, incorporó al bajista José Miguel Fernández, componente que se convertiría en pieza clave del sonido posterior.

Confirmación con “Dónde está la luz” (1993)

En 1993 se publicó “Dónde está la luz”, séptimo álbum que experimentó con arreglos más pulidos y logró certificado de oro por superar 50.000 copias. Temas como “A toda esa gente” se imprimieron en el imaginario cultural del rock español.

La mirada hacia el mundo árabe: “Árabe” (1995) y “Tánger” (1998)

En 1995, Medina Azahara dio un salto artístico con el doble álbum “Árabe”, primer trabajo en incorporar instrumentación y motivos marroquíes, y que incluyó además versiones de artistas como Paco de Lucía o Miguel Ríos. Fue certificado disco de oro en julio de ese mismo año. Tres años más tarde llegó “Tánger”, grabado entre Madrid y Tánger e interpretado con la orquesta marroquí Taktuka Yeblia; el álbum debutó en el número 10 de las listas y superó las 50.000 copias vendidas.

Transición al nuevo milenio y exploraciones estéticas

Ya en el año 2000, publicaron “XX”, una obra que celebra veinte años de carrera. A este disco le siguieron “Tierra de libertad” (2001), “Aixa” (2003), “La estación de los sueños” (2005), “Origen y leyenda” (2009) y “La historia continúa” (2011). Cada uno mostró nuevas facetas: desde hooks más melódicos y acústicos hasta incursiones en sonidos más contemporáneos. Al mismo tiempo lanzaron discos en directo y recopilatorios que rescatan la esencia de su trayectoria.

Década de 2010 y vigencia creativa

Durante los años 2010 Medina Azahara continuó publicando material: “La memoria perdida” (2012), “Las puertas del cielo” (2014), “Paraíso prohibido” (2016), “Trece Rosas” (2018). Cada disco reafirmó la solidez compositiva y la capacidad de reinventarse sin perder identidad.

La despedida: “Llegó el día” (2021) y “El sueño eterno” (2023)

En 2021, el grupo lanzó “Llegó el día”, disco que anticipó su etapa final. En noviembre de 2023 presentaron “El sueño eterno”, su último álbum de estudio, demostrando que tras más de cuatro décadas aún conservan vitalidad y creatividad.

Reconocimientos institucionales y el legado cordobés

En febrero de 2025, la Junta de Andalucía otorgó a la banda la Medalla de Andalucía “Manuel Clavero Arévalo”, un reconocimiento institucional a medio siglo de trayectoria y defensa de la cultura andaluza sobre los escenarios. Este galardón refrenda su papel como embajadores culturales de la región y su aportación al rock nacional.

La gira de despedida: “Todo tiene su fin” / “Hasta Siempre”

Tras 45 años continuos de actividad y más de 4.000 conciertos, en octubre de 2024 anunciaron que emprenderán su gira de despedida, titulada “Todo tiene su fin” o “Hasta Siempre”, que arrancará en enero de 2025 y se prolongará hasta 2026. El tour ha confirmado al menos 20 ciudades — entre ellas Salamanca, Madrid, Barcelona o Córdoba — y se presenta como la culminación digna de una carrera extraordinaria.

El factor humano: cambios, constancia y banderas andaluzas

Aunque Manuel Martínez sigue siendo el único miembro original en activo, la formación ha experimentado múltiples cambios a lo largo de los años. Nombres como Paco Ventura (guitarra), Manuel Ibáñez (teclados) o José Miguel Fernández (bajo) han contribuido a sostener la esencia de la banda. La capacidad de mantenerse cinco décadas en la carretera, interpretando una y otra vez un repertorio tan amplio como diverso, sólo puede explicarse con trabajo, calidad y un arraigo muy profundo en sus raíces.

Influencia, discografía y huella musical

Con 22–24 discos de estudio (fuentes varían según conteo), cinco obras en directo y varias recopilaciones, Medina Azahara dejó un catálogo extenso y coherente. Su música, marcada por la libertad, el tiempo y la identidad, resuena en generaciones de músicos y fans. Temas como “Paseando por la mezquita”, “Necesito respirar”, “A toda esa gente” o “Todo tiene su fin” forman parte del imaginario colectivo del rock en español.

Conclusión: un adiós con dignidad

La despedida de Medina Azahara no es meramente el cierre de un capítulo; es el festejo de una trayectoria coherente, longeva y comprometida con una Andalucía que quiso sonar con voz propia. Desde los compases profundos del debut “Medina Azahara” hasta los matices reflexivos de “El sueño eterno”, su legado fusiona rebeldía, música y cultura. La gira “Todo tiene su fin” / “Hasta Siempre” compone el epílogo de una historia inolvidable. El final llega, sí, pero la huella andaluza que trazó Medina Azahara resonará con fuerza en los oídos y los corazones de quienes respiramos rock con sabor sureño.